SI LAS MIRADAS HABLARAN

Acabo de salir del trabajo, cascos puestos y música a tope, vivo en mi propio videoclip continuo. Reviso los mensajes. Le he avisado de que ya iba de camino, pero no me ha leído. Se estará haciendo de rogar para castigarme por el plantón del día anterior? O simplemente no ha mirado el teléfono? Yo sigo a mi ritmo. Llego al bar, es casi la hora y sigo sin saber nada de él. Me duelen los pies, estoy agotada y para que negarlo un poco mosqueada por si me la ha querido devolver. Esperaré los cinco minutos de cortesía. La música retumba en mis oídos y atraviesa todo mi cuerpo con una suave vibración. Estoy totalmente abstraída mirando el móvil. Un pequeño escalofrío recorre mi cuerpo, algo que me alerta de que levante la mirada. Lo encuentro mirándome fijamente a unos metros de distancia. Me da un vuelvo el corazón, joder que susto.

Nos sentamos en la terraza y pedimos unas cervezas. Lo observo con mas calma. No es como me esperaba, es mucho mejor. Me atrae sus facciones. Espero no parecer una loca observándolo. La conversación es agradable, lanza dardos envenenados siempre que puede. Mi plantón del día anterior hirió su masculinidad. Lo hice sin mala intención y desde luego, después de tener semejante monumento frente a mi, me arrepiento mucho. Siento la tensión en el ambiente, mi pulso está un poco acelerado y mi tanga húmedo. Terminamos las cervezas y nos dirigimos a mi casa. Me lleva en moto. Cuanto tiempo sin subir a una, que recuerdos.

En casa le ofrezco una cerveza, aunque en verdad me muero por relamer sus labios. En el sofá seguimos charlando. No hay mucho espacio, pero de todas formas no entramos en contacto. trago, risas, miradas, la tensión aumenta. Mi cuerpo esta ardiendo. Veo un acercamiento por su parte, su rostro se acerca al mío. Yo me inclino hacia él y nuestros labios entran en contacto. Nos besamos con ansia. Me subo ahorcajadas sobre él. seguimos devorándonos, sus manos bajan desde mi cuello, por mi clavícula hacia mis pechos. Los aprieta mientras sigue besándome, mis pezones se endurecen. Retira mi camiseta, mis exuberante pechos quedan libres. una mano busca mi culo, acompañando mis movimientos de cadera. Me contoneo buscando la fricción entre ambos. Mi entrepierna esta empapada y me arde, desea ser penetrada. Me incorporo y le indico que me siga.

Lo espero en la habitación. Sigue totalmente vestido. Cuando se quita la camiseta se me seca la boca. No esperaba ese torso tan definido. Dios, que bueno está. tira de mis pantalones y me los quita. el se deshace de los suyos. Me incorporo y me acerco a su entrepierna. Libero su erección bajándole los calzoncillos. Su miembro sale disparado frente a mi cara. Ni me lo pienso, solo me dejo llevar. La introduzco en mi boca. La lamo entera, lubricándola con mi saliva. Escucho sus jadeos. Me enciendo todavía más. No puedo parar, quiero succionar hasta que me pida que pare. De pronto me separa de él. Me recuesta en la cama y se posiciona frente a mi. Sus dedos juegan con mis pliegues. se introducen en mi interior haciéndome jadear. Aumenta su ritmo en mi interior y mi espalda se arquea en busca de más placer. Las caderas se contonean para absorber cada ligero movimiento en mi interior. Mis muslos se tensan cada vez más, mis paredes se contraen. Unas últimas caricias en mi interior me transportan a mi primer orgasmo. Ríos de placer recorren mis extremidades.

Me deja un poco de espacio para que vuelva a esta habitación tras el orgasmo. Observa atentamente como mi cuerpo se retuerce de placer y vuelve a la calma. A penas unos segundos después siento como se acerca a mi entrada. Me penetra con una estocada certera. un grito se escapa de mi garganta. Es demasiado placentero. Mi vagina se aferra a su miembro, lo succiona para sentir mas intensamente las entradas y salidas. empieza lento y profundo, pero poco a poco se acelera. Mi cuerpo desea esa intensidad, el siguiente orgasmo está muy cerca. Lo animo a aumentar el ritmo, acompaño sus estocadas con mis piernas en su espalda y unos azotes en su trasero.

En pocos segundos vuelvo a estallar, no puedo reprimir tanto deseo y placer. Se queda quieto en mi interior mientras mis paredes palpitan alrededor de su erección. Me mira fijamente a los ojos y me susurra "arriba".

Obedezco inmediatamente. Es mi turno, me coloco sobre el. Su miembro resbala en mi entrada, estoy totalmente empapada. Me contoneo lentamente, el ritmo de mis caderas va en aumento. Esta posición me da un placer inmenso. Yo domino en todo momento la intensidad que quiero, el orgasmo se acerca rápidamente. No puedo dejar de moverme, la fricción es inmensa y mi cuerpo estalla en mil pedazos. se me nubla un poco la vista y la respiración está totalmente agitada. Mis pliegues absorben cada gota de placer. Me pide que adelante las piernas para quedarme de cuclillas. Se me hace un mundo, me parece que no va a ser posible. Acabo de tener un orgasmo increíble y me tiembla todo. Tengo miedo de caer sobre el. Pero lo obedezco y me posiciono como él quiere. me agarro al cabezal de la cama con fuerza. y cuando estoy segura empieza a moverse con frenesí imparable. me penetra muy profundo, muy intenso e increíblemente duro. Si los anteriores orgasmos me han flipado, el que se avecina me va a romper en dos. Mis cuerpo se tensa mas de lo normal, no puedo dejar de gemir y gritar. Es todo demasiado intenso. Mi cuerpo esta totalmente rígido. Y de pronto un rayo me atraviesa, todo el cuerpo se destensa al unísono en olas de placer, la vista se me nubla y mis piernas fallan, ni vagina palpita y se lubrica. Menos mal que estoy cogida al cabezal, pero aun así me desplomo. Este orgasmo ha sido sin duda una puta maravilla.

Mi cuerpo quiere más, mi mente pide un descanso. Me bajo y me coloco entre sus piernas. Me introduzco su miembro en la boca. Puedo saborear mis fluidos, mis orgasmos. La chupo, succiono y masturbo, quiero devolverle todo el placer que el me ha provocado a mi. Me concentro en mi tarea y escucho su cuerpo. Cada cambio en la respiración, cada musculo que se tensa, cada jadeo que se escapa por su deliciosa boca. Se agita debajo de mi, siento que está cerca. Lo observo disfrutar, su mirada lujuriosa observando cada uno de mis movimientos. Mi lengua extrae hasta la ultima gota de su orgasmo, me llena la boca mientras gime de placer.

Caemos exhaustos en la cama.

Me despido de él deseando un segundo encuentro. Será tan espectacular como este?

Spoiler. Fue mucho mejor.